EP (extended play), es un acrónimo anglosajón que traducido al español significa duración extendida y se utiliza como denominación para un formato de grabación musical.
La duración de un EP es muy larga para considerarse como sencillo, simple o single, y muy corta como para considerase como álbum.
Inicialmente se llamó EP al disco de vinilo de 7 pulgadas de diámetro, grabado a 33⅓ RPM. Esta diferencia de velocidad con respecto al sencillo grabado a 45 RPM le permitía tener una duración mayor (un máximo de 25 minutos, 12'30" por cada cara) frente a la duración del simple, cuya duración máxima no podía superar los 15 minutos. Cuando los vinilos se estandarizaron a 33⅓ RPM, se llamó EP a aquellos discos de 7" que tenían más de una canción por cara.
Actualmente, con la llegada del CD, la distinción entre single, EP y LP (álbum) es arbitraria, y está basada en factores tanto artísticos como comerciales. Generalmente, un EP tiene una duración máxima de 20-25 minutos y suele ser un disco tipo Mini-CD. A partir de ese tiempo ya se debe hablar de un álbum en formato CD. Sin embargo algunos EP han sido publicados en el formato estándar del CD.